La fuerza de la fe y el compromiso volvieron a encontrarse este sábado en la Casa Parroquial de Miguelturra, donde se celebró la Asamblea General de Hermanos y las Elecciones a Hermano Mayor de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Piedad. En un clima de fraternidad y esperanza, Ana de Toro Yébenes fue reelegida de manera unánime como Hermana Mayor, renovando así el vínculo de confianza que la comunidad ha depositado en ella para liderar los próximos cuatro años.

Ana de Toro señala que afronta “esta segunda legislatura con la misma responsabilidad y compromiso”, agradecida, por supuesto, del “respaldo de mis compañeros de la Junta de Gobierno y el resto de hermanos cofrades”. La Hermana Mayor señala que “continuaremos trabajando por y para la hermandad, una vez que ratifique el Obispado mi cargo”. A partir de ahí, “nos sentaremos a dar forma a diferentes proyectos para seguir cuidando nuestro patrimonio humano y artístico”.

La vida “dentro de una hermandad aporta muchos valores y tienes la oportunidad de estrechar vínculos con gente maravillosa, comprometida con un bien común”. De cara a esta nueva legislatura, “seguiremos trabajando codo con codo para seguir sumando experiencias cofrades, con la intercesión de nuestros Sagrados Titulares, todo será más fácil”.

La jornada de elecciones, cargada de significado, no solo cumplió con el rito democrático de la hermandad, sino que evidenció la solidez de un proyecto compartido, forjado en el amor a los titulares y en la dedicación diaria. Ahora, tal y como establece la normativa eclesial, la decisión será comunicada al Obispo, Gerardo Melgar, quien deberá ratificar oficialmente el nombramiento, rubricando así la continuidad de un servicio que busca siempre el mayor bien de la Hermandad.

Además, Ana de Toro explica que los últimos cuatro años han estado “marcados por grandes retos para la hermandad para dar continuidad a todas y cada una de las actividades anuales; cultos, estaciones de penitencia, actos de Exaltación a la Saeta, Cruces de Mayo, voluntariado con los mayores, campañas solidarias ante desastres naturales o bélicos, el Belén Viviente, o la participación en las fiestas patronales con un chiringuito”.

En esta primera etapa “hemos tenido que tomar decisiones muy relevantes como es el cambio de la Estación de Penitencia de María Santísima de la Esperanza de la madrugada del Viernes Santo a participar cerrando el cortejo en la procesión del Domingo de Resurrección con el resto de hermandades y cofradías de nuestro pueblo”, señala.

En la segunda, tras ser elegida por unanimidad, Ana de Toro incide en que “somos una hermandad con muchas inquietudes y ante las adversidades que puedan llegar, seguro que sabemos reinventarnos para dar lo mejor de nosotros”. Siendo consciente, además, que “lo más importante es que los hermanos sientan la necesidad de sumarse a cada proyecto y entre todos haremos más grande si cabe nuestra cofradía”.

Desde la Hermandad del Santísimo Cristo de la Piedad piden «nuevamente a nuestros titulares para que intercedan e iluminen su tarea al frente de nuestra Hermandad”. En una época en la que el liderazgo requiere no solo decisión, sino también cercanía, humildad y oración, la renovación de Ana Isabel De Toro Yébenes al frente de la Hermandad se convierte en un signo claro de estabilidad, ilusión y futuro.