El Ayuntamiento de Miguelturra ha rendido homenaje este martes a cinco trabajadores municipales jubilados durante el pasado año 2024, en un acto cargado de emotividad celebrado en la antesala del CERE, que ha coincidido con el tradicional aperitivo de Navidad organizado por el consistorio para fomentar la convivencia entre todo el personal municipal.

Las personas homenajeadas han sido Pilar Rodrigo, Agustina Naranjo, Santos Peña, Pepe Yébenes y Juan Ramón Díaz-Pinto, quienes recibieron el reconocimiento público de la Corporación Municipal tras décadas de servicio al municipio. Al acto asistieron el alcalde de Miguelturra, Luis Ramón Mohíno, el concejal de Recursos Humanos, Miguel Ángel García, así como varios concejales y trabajadores municipales.

El encargado de abrir el acto fue Miguel Ángel García, quien explicó que se había querido hacer coincidir este homenaje con el aperitivo navideño “para que los jubilados se sientan arropados por quienes han sido sus compañeros durante tantos años”. El edil recordó que este tipo de reconocimientos se retomaron el pasado año, tras quedar interrumpidos por la pandemia, con la intención de darles continuidad coincidiendo con fechas señaladas como Santa Rita o el final del año.

La primera en recibir el homenaje fue Pilar Rodrigo, hasta hace poco directora del Centro de la Mujer, quien agradeció el reconocimiento con cercanía y humor, asegurando que está “muy ricamente jubilada”. En un tono más reflexivo, subrayó la importancia de trabajar con motivación y ganas, destacando que “trabajar a disgusto es lo peor del mundo” y que el servicio público debe afrontarse siempre con ilusión por el pueblo.

Posteriormente fue el turno de Agustina Naranjo, trabajadora del área de Parques y Jardines, quien dio las gracias al Ayuntamiento y a sus compañeros, reconociendo que, aunque la jubilación se disfruta, “hay veces que nos acordamos del trabajo”.

El arquitecto técnico Santos Peña, tras 37 años de trayectoria profesional en el Ayuntamiento, afirmó que lo que más echa de menos es “el factor humano”, destacando las amistades forjadas y señalando que la jubilación es una nueva etapa que hay que afrontar con ganas e ilusión.

El homenaje continuó con Pepe Yébenes, definido por el concejal de Recursos Humanos como un trabajador “histórico” del consistorio, que durante años se dedicó al sector de la limpieza viaria. Yébenes recordó que “todo principio tiene su final”, aunque confesó que sigue manteniendo el contacto con sus compañeros, con quienes comparte café varios días a la semana.

Cerró el turno de intervenciones Juan Ramón Díaz-Pinto, antiguo director de la Biblioteca Municipal, quien explicó que prácticamente toda su vida laboral ha estado ligada al Ayuntamiento. Reconoció que la jubilación deja “un sabor agridulce”, pero también abre la puerta a una nueva etapa vital.

El alcalde, Luis Ramón Mohíno, tomó la palabra para felicitar a las personas jubiladas y poner en valor la huella que han dejado en el Ayuntamiento, señalando que ese legado es el que recogen ahora otros trabajadores municipales. “Es un buen momento para reconocer vuestro trabajo y el esfuerzo diario de quienes trabajan por el beneficio del pueblo de Miguelturra”, afirmó.

El acto concluyó con los deseos de feliz Navidad y un próspero año nuevo por parte del alcalde y del concejal de Recursos Humanos, recordando que “si es próspero para vosotros, lo será también para toda Miguelturra”.