El Miguelturreño Féminas notificó a través de un comunicado en sus redes sociales que no competirá finalmente esta temporada. Una decisión que llega siete días antes del estreno liguero y «con todo nuestro dolor», expresa el club en su comunicado. Las chicas no saldrán a competir este año, pese a que ya llevaban varias sesiones de entrenamientos a las órdenes de Emiliano Ruiz Fernández y Rubén Escobar, con la mente fijada en el inicio de Liga, programado para el próximo domingo 8 de noviembre ante el CD Sonseca.
Integrantes del Miguelturreño Féminas han confirmado a este diario que «los motivos son claros, viendo cómo evoluciona el Covid-19 no podemos arriesgarnos a competir y más cuando la cosa no mejora y está empeorando». Además, el club churriego expresa que «las jugadoras no están muy convencidas de jugar y el equipo no puede competir».
El Miguelturreño Féminas confirma además que «este año haremos un paréntesis y volveremos cuando todas las condiciones lo permitan. Mucha suerte a los demás equipos y ojalá puedan competir hasta el final», concluye su comunicado el club con la ilusión de poder volver cuanto antes y reaparecer en la campaña 2021/22. Hasta ahora, el conjunto churriego no había disputado ningún partido de pretemporada.
Como ya adelantamos hace unos días en este diario, el equipo había sufrido complicaciones para confeccionar la plantilla debido a la Covid-19 y motivos académicos. Muchas jugadoras de la campaña anterior no continuaban en la disciplina churriega por estos dos motivos mencionados anteriormente, lo que obligaba al cuerpo técnico del ‘Reño’ féminas a renovarse y buscar jugadoras para completar el plantel. Sara Céspedes, María Yébenes, Sandra Heredia, María Donaire o Alba Rubí son algunas de las jugadoras que sí confirmaron su continuidad en la plantilla. A ellas se sumaron Mari Carmen, María Peralta, Virginia, Irene y Elena, las nuevas incorporaciones que iba a tener el equipo para esta temporada.
Las chicas estaban entrenando lunes y miércoles (20.30 horas) en el Candelario León Rivas y los viernes (19 horas) en el Estadio Municipal. Unas sesiones complicadas de hacer, aunque estrictamente necesarias, puesto que tenían que practicar con mascarilla y divididas en diferentes grupos para evitar la aglomeración, así como mantener la distancia de seguridad. Unas medidas que llevaron a rajatabla. Todo esto con la ayuda de Noelia González, que ejercía como delegada del equipo, tomando la temperatura a las jugadoras antes de entrenar, organizando los grupos y ayudando en la desinfección del material, entre otras muchas labores esenciales.