Caminar, andar o correr por los caminos de Miguelturra es toda una odisea teniendo en cuenta el deficitario estado en el que se encuentran las calzadas. Los baches son una constante y el peligro de lesionarse o de tropezar aleja a los vecinos de estas zonas públicas que deberían tener un estado mucho mejor del que presentan. Deberían estar arregladas, algo que los vecinos de Miguelturra demandan de forma constante, aunque el Ayuntamiento hace caso omiso.
El mal estado de los caminos es algo que se ha convertido en habitual yse viene repitiendo en los últimos años. Tan sólo basta con salir a pasear por los alrededores de la localidad para encontrar estos espacios abandonados de la mano de Dios. Caminos y vías que muchos utilizan para trabajar. Pero la situación se agrava cuando la meteorología y la lluvia hace acto de presencia. El peligro es todavía mayor en estas circunstancias. Incluso los vehículos tienen que maniobrar más de la cuenta para esquivar estos barrancos. Estos caminos se han convertido en auténticas montañas rusas, aunque sin gracia ninguna.

El camino de Almagro es un claro ejemplo de ello. Apenas separan unos centímetros entre un bache y otro, ya que el estado de esta calzada es casi impracticable. Da igual que se trate de una superficie de tierra o de asfalto, el estado es deplorable. Incluso las personas de mayor edad han dejado de pasar por estas zonas ante el peligro que existe.
Ya han pasado meses y años y la situación sigue igual. La previsión es que se mantengan así porque nadie mueve un dedo por dignificar las calzadas en favor de los vecinos de la localidad. Estas deficiencias se pueden encontrar además en otros espacios públicos del municipio, hecho que los vecinos siguen denunciando semana tras semana. Y es que la situación de las calzadas de Miguelturra en ciertos aspectos deja mucho que desear.
