En la calle donde suenan risas y balbuceos a primera hora de la mañana, entre mochilitas de colores y carritos que van y vienen, hay un lugar que desde hace casi veinte años forma parte del corazón de Miguelturra: la Escuela Infantil ‘Los Soletes’. Allí, entre dibujos, canciones y recuerdos compartidos, una nueva etapa acaba de comenzar. Y al frente de ella, una cara muy conocida para niños, padres y compañeras: Lara Zapata Cruz.
Lara tiene 31 años y una sonrisa que parece hecha a medida para su trabajo. Cinco años lleva ya en esta escuela y este verano ha dado el gran salto para ponerse al frente de ella, asumiendo la dirección del centro desde el pasado mes de julio. “Siempre había soñado con tener mi propia escuela infantil, pero lo veía como algo imposible. Era un sueño, no un plan”, confiesa entre risas. “Pero las circunstancias se dieron, y con el apoyo de mi familia, me lancé”.


Lara es de Miguelturra “de toda la vida”. Estudió aquí para después seguir formándose en Ciudad Real, donde se sacó primero el título de Gestión Administrativa y, más tarde, el de Educación Infantil, compaginando sus estudios con trabajos en hostelería. “Desde pequeña me encantan los niños, los bebés… Son mi pasión. De niña jugaba a darles la papilla, a cambiarles los pañales, a darles clase. Siempre supe que quería dedicarme a esto”.
Y así fue. Tras hacer las prácticas en la propia Escuela Infantil ‘Los Soletes’, en plena pandemia recibió la llamada que cambiaría su vida: le ofrecían incorporarse al equipo. “Dejé la hostelería y entré cubriendo una baja, sin saber si luego podría quedarme. Pero me daba igual, porque estaba donde quería estar. Trabajar en lo que te gusta no es trabajar”.

Este verano, cuando Isabel, la anterior directora, decidió traspasar la escuela, Lara sintió un nudo en el estómago. “Me daba mucha pena pensar que pudiera cerrar. Aquí somos una familia: las compañeras, los niños, las madres… Y este año además me toca graduar a un grupo al que cogí de bebés. Son mis niños”. Así, tras pensarlo —y mucho—, tomó la decisión y, con el apoyo de su familia y su pareja, se lanzó a la aventura. “Mi padre fue quien me dio el empujón final. Me dijo: ‘adelante, y si no va bien, no pasa nada’. Y aquí estamos. No puedo estar más contenta”.
El inicio no ha sido precisamente un paseo. “Pasar de estar en el aula a gestionar una empresa es otro mundo”, reconoce. “Los primeros días fueron intensos: papeleos, cambios de gestión, preparación del nuevo curso… Pero poco a poco te haces”. Por suerte, cuenta con un equipo que conoce bien y que la arropa. “Cristina y Prado llevan aquí toda la vida. Para cualquier duda, ahí están. No cambia nada el hecho de que ahora yo sea la directora. Somos un equipo y eso no se pierde”.
También las familias recibieron la noticia con emoción. “Hubo padres que lloraron. Porque al final nos tienen mucho cariño y saber que la escuela continúa con alguien que conocen, en quien confían, les dio tranquilidad y alegría”.

Una escuela con futuro y nuevas ideas
‘Los Soletes’ mantiene su esencia: un trato cercano, familiar y profesional con un equipo entregado. Pero Lara también quiere aportar su toque. “Queremos acondicionar un aula para psicomotricidad e incorporar talleres por las tardes: yoga para bebés y madres, actividades de estimulación temprana, talleres conjuntos de padres e hijos…”. Además, tiene claro que la visibilidad es importante: “Hacemos muchas cosas dentro de la escuela que la gente no ve. Me gustaría mostrarlo en redes sociales, que las familias conozcan más nuestro trabajo”.
Tampoco faltan planes para seguir creciendo en momentos especiales: “En Carnaval queremos ampliar el recorrido y contar con más animación, y las graduaciones me gustaría hacerlas fuera del centro, en algún espacio cedido por el Ayuntamiento. Son momentos bonitos que merecen vivirse a lo grande”.
Con casi veinte años de historia, ‘Los Soletes’ es la única escuela infantil privada de Miguelturra. Abre sus puertas cada día de 7:30h a 18:30h, con un horario flexible y adaptado a cada familia. “Estamos abiertas todo el año y la matrícula se puede hacer en cualquier momento. Todo el mundo está invitado a venir, conocer las instalaciones y hablar con nosotras”, invita Lara.
Y, con la misma sonrisa que ha mantenido durante toda la entrevista, concluye mandando un mensaje para las familias de Miguelturra: “No hay mejores manos que estas para cuidar de sus hijos”.
Hola, creo que es tu oportunidad y con la ilusión, ganas, buen hacer vas a conseguir que los soletes vuelva a ser la escuela que quieres que sea y podrás atender y aportar tu granito de arena a la sociedad de Miguelturra. Mucha suerte 😘
Enhorabuena, me alegro mucho