Las Campanadas Churriegas volverán a celebrarse por todo lo alto este mismo sábado 31 de diciembre. El encuentro tendrá lugar a las 13h frente a las puertas del Ayuntamiento en la Plaza de España. El objetivo es que el máximo número de churriegos y visitantes puedan disfrutar de un momento muy divertido y entretenido, a pocas horas de dar la despedida de forma oficial al presente año.
Después de muchos años en los que estas campanadas se celebraban a la 1 de la madrugada, ya en 2019, la última Nochevieja antes de la pandemia, se decidió cambiar el horario a las 13h para fomentar la asistencia de pequeños y mayores. Algo que fue sin duda un éxito, pues la Plaza estuvo abarrotada y, a ritmo de charanga, los churriegos despidieron el año en comunidad.
Esta iniciativa está organizada por la Asociación Ágaroth y cuenta con la participación de la Charanga Alhiguí. Para que las campanadas churriegas tengan aún más color y emoción se entregará un cotillón y uvas a cada persona asistente.
Campanadas de fin de año
Quedan pocos días para que acabe el año y cada vez está más cerca el momento de las campanadas. En Nochevieja, se celebra esta tradición comiendo uvas para dar la bienvenida a un nuevo año. El 31 de diciembre por la noche es habitual reunirse en familia o amigos y celebrar las campanadas. Este es un momento de nervios por miedo a no comerse las uvas a tiempo y también de risas. Por todo ello, es importante conocer bien el sistema de las campanadas y evitar errores.
Antes de las campanadas y los cuartos, primero baja el carrillón, una bola que hace un ruido similar a unos golpecitos rápidos. Este aparece 28 segundos antes de las 00:00:00 y dura siete segundos. Después de una pausa de tres segundos, suenan los cuatro cuartos, que duran cuatro segundos cada uno. Es importante recordar que los cuartos suenan como unas campanadas dobles, similares al sonido “ding-dong”.
Cuando suenan los cuartos, se hace una pausa de cuatro segundos y, a las 00:00:00, empiezan a sonar las doce campanadas, que suenan cada tres segundos. La principal diferencia con los cuartos es su sonido, ya que las campanadas solo suenan una vez, con un “dong”. Además, los cuartos suenan cuatro veces y las campanadas doce.
Si se miran las campanadas por televisión, resultará muy sencillo comer las uvas correctamente porque los presentadores y los gráficos ya nos indican cuando suenan las campanadas.