La Asociación AMPARO LGTBI y el Ayuntamiento de Miguelturra organizaron en la tarde del sábado 28 de junio el acto institucional del Día del Orgullo LGTBI. Una cita que volvió a convertir a la localidad en altavoz de la igualdad, la diversidad y los derechos humanos. Un evento cargado de emoción y reivindicación en el que se entregó la Mención Orgullo Diverso 2025 a la familia formada por Alberto Ramírez y Sonia Bertol, padres de Carla y del joven Noah, un menor trans que emocionó con sus palabras de agradecimiento.

El acto, conducido por Mariano Donate, presidente de AMPARO LGTBI, contó con la presencia de Caridad Sánchez, concejala de Igualdad, así como de otros representantes de la Corporación Municipal, y tuvo momentos de especial intensidad emocional, como el discurso de agradecimiento de la familia premiada y la entrega inesperada de la Mención Compromiso 2025 a la propia Asociación AMPARO, en reconocimiento a su trayectoria.

Caridad Sánchez abrió el acto con un mensaje claro: “Los derechos LGTBI son derechos humanos, y el amor, la identidad y la libertad no tienen una sola forma ni un solo color”. La edil insistió en que «vivir con orgullo es un derecho» y felicitó públicamente a la familia reconocida por su valentía: “Noah, enhorabuena. Aquí estamos para lo que necesitéis. Gracias por hacer del Orgullo una lucha compartida”.

Por su parte, Mariano Donate protagonizó una de las intervenciones más reivindicativas del acto, denunciando que todavía hoy se siguen escuchando en espacios institucionales frases como ‘el matrimonio es entre hombre y mujer’ o ‘los niños se tienen que criar con una madre y un padre’; afirmaciones que, según advirtió, “son la semilla de futuros delitos de odio”. Lamentó que esas ideas sigan presentes incluso en los ayuntamientos, y subrayó que el Orgullo es una lucha social, no un negocio ni un capricho: “Podría pasarme toda la noche enumerando insultos y afirmaciones que hemos oído recientemente en boca de representantes públicos”.

Donate también reivindicó la labor de AMPARO, “un colectivo que trabaja desde el respeto y la libertad de quienes piden ayuda”, y recordó que en el último año han acompañado a más de veinte familias, muchas de ellas afectadas por el miedo, la incomprensión o incluso el riesgo de suicidio. Explicó que, gracias a la participación activa del colectivo en órganos municipales como el Consejo de Juventud o el Consejo de Salud, han podido desarrollar en Miguelturra el programa de salud más amplio de Castilla-La Mancha fuera de Madrid, con más de 76 intervenciones directas en apenas unos meses.

Además, destacó el papel de la asociación en el ámbito legislativo, con más de 140 enmiendas presentadas en normativas clave como la Ley LGTBI y la ley trans de Castilla-La Mancha, y celebró que gracias a ese trabajo asociativo, “esta comarca es hoy una de las más activas y organizadas de toda Europa en la defensa del colectivo”.

También tuvo palabras de agradecimiento para quienes les han acompañado desde el ámbito público: “Gracias Rosa, Teresa, Carmen y Gema, del Centro de la Mujer, por darnos siempre la mano; gracias José, del Centro Joven, por tu trabajo y tu cariño. Sin ti, muchas cosas no serían posibles”.

El presidente de AMPARO aprovechó además para lanzar un mensaje claro a otras instituciones locales: “Esperamos que la Policía Local algún día entienda que cuando te llaman maricón y te apedrean, eso no es una incidencia, es una agresión”. Y pidió al IES Campo de Calatrava de Miguelturra más implicación y menos negaciones, porque “cuando llamamos a las puertas es para ayudar a personas que lo están pasando mal”, afirmó.

Una entrega cargada de emoción

El momento más emotivo de la tarde llegó con la entrega del premio a la familia de Noah, un reconocimiento cargado de simbolismo, valentía y amor incondicional. Entre lágrimas, abrazos y aplausos, Mariano Donate se dirigió a Alberto, Sonia, Carla y Noah para agradecerles “una vida de lucha, de compromiso, de amor inagotable, de tristezas y felicidades vividas”. Y concluyó su intervención pidiéndoles perdón: “Perdón si esta sociedad no ha estado a la altura. Perdón por las lágrimas de incomprensión. Perdón por leyes que llegan tarde. Perdón si en algún momento habéis sentido que no habéis podido ser”.

Visiblemente emocionado, Alberto Ramírez, padre de Noah, tomó la palabra para agradecer el reconocimiento: “Recogemos este premio con muchísima emoción. No solo como familia, sino como personas comprometidas con algo tan sencillo y tan necesario como dejar que cada quien sea quien es. Mi hijo Noah nos ha enseñado el verdadero significado del orgullo, del valor y del amor sin condiciones. Si con nuestra visibilidad podemos ayudar a otras familias a entender, apoyar y sumar, todo esto habrá merecido la pena”.

Sonia Bertol, madre de Noah, quiso agradecer a Mariano, a AMPARO y a Tomás Muñoz, director del colegio Santísimo Cristo de la Misericordia, su implicación en el crecimiento de su hijo. “Noah, iremos de la mano contigo hasta el fin”, concluyó con voz entrecortada.

Por su parte, el propio Noah se dirigió al público con una breve pero conmovedora intervención: “Quiero dar las gracias a mis padres, al colegio El Cristo por haberme aceptado y apoyado, a mi hermana… y a Mariano también. Y a todo el mundo, muchas gracias”.

Sorpresa final con nuevo reconocimiento

Cuando el acto parecía llegar a su fin, la concejala Caridad Sánchez volvió a tomar la palabra para anunciar que la Mención Compromiso 2025 no iba a quedar desierta, como se había previsto inicialmente. “Desde el año 2019, la Asociación AMPARO trabaja incansablemente por la igualdad, el respeto a la diversidad y la defensa de los derechos y libertades de las personas LGTBI”, explicó. Y añadió que el colectivo ha sido clave en la sensibilización, educación, visibilidad y denuncia de cualquier violación de derechos por razón de orientación o identidad sexual.

Por todo ello, la Concejalía de Igualdad decidió otorgar la Mención Compromiso 2025 a la propia Asociación AMPARO LGTBI, un aplauso unánime del público con el que, tras leer el manifiesto, se cerró un acto que fue mucho más que un homenaje: una reivindicación del derecho a ser, a amar y a vivir con orgullo.