El Club Pádel de Miguelturra dio por terminada esta semana a su primera temporada en el deporte en edad escolar. Un total de 68 niños y niñas han podido aprender los conceptos básicos de esta disciplina deportiva, pese a las dificultades que ha habido con una temporada atípica provocada por el coronavirus.
El club churriego subraya que “no os podéis imaginar lo que lo vamos a echar de menos estos meses. Ha sido una gran experiencia”. Y es que han tenido durante meses a niños y niñas apasionadas por aprender a jugar al pádel, un deporte al alza y que cada vez más gente práctica. Una disciplina dirigida a personas de cualquier edad.
Los pequeños han podido además compartir momentos con sus compañeros y disfrutar de horas de diversión y entretenimiento, pese a tener que llevar siempre la mascarilla y mantener la distancia de seguridad, como medidas obligatorias. “No solo tenemos un gran futuro en el deporte, lo tenemos socialmente, debéis estar orgullosos madres y padres”, explica la entidad churriega. Y es que el principal objetivo del deporte en edad escolar es no solo iniciarles en la práctica sino también formar a personas con los valores fundamentales de la sociedad.
Mere, Jesús, Víctor y Maxi han sido los encargados de monitorizar a los 68 inscritos durante estos meses, inculcándoles los conceptos básicos del pádel y haciéndoles sacar una sonrisa de oreja a oreja. El club de la localidad no solo les agradece su compromiso a ellos, sino que también muestra su agradecimiento a la concejalía de deportes del municipio y a los trabajadores de los complejos deportivos, como Rafa, Casto, piedra, Diego, Raúl, Estrella y Agapito. El Club Pádel de Miguelturra ya prepara con ilusión y ganas el regreso de los pequeños a las pistas. Aunque habrá que esperar unos meses para iniciar la próxima temporada, que podría empezar allá por el mes de octubre.