La Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha ha hecho oficial los grupos y el calendario de la Liga Juvenil Preferente para esta próxima temporada. En estos grupos ha incluido al CD Miguelturreño. Sin embargo, el club continúa a la espera de la resolución del contencioso administrativo que les permita jugar en Liga Nacional Juvenil.
Así lo ha hecho oficial el club en un comunicado publicado en sus redes sociales:
Y es que con la declaración del Estado de alarma el pasado mes de marzo se dieron por finalizadas todas las competiciones de fútbol no profesional, con lo que la FFCM tuvo que resolver los ascensos y descensos. En la categoría de Juvenil Preferente, ante la imposibilidad de ascenso del CD Illescas ‘B’, se decidió que ascendiera el mejor de los terceros, aplicando un coeficiente contemplado en las Bases de la Competición de la Liga Juvenil Preferente para la temporada pasada, así como en el Reglamento Técnico de la propia FFCM. Esta decisión parecía la más justa y equitativa y se ajustaba a las normas federativas que regulaban la competición. De esta forma, el equipo juvenil del Miguelturreño debía jugar esta temporada en la Liga Nacional.
Sin embargo, esta decisión fue impugnada por el Club Odelot Toletum ante el Comité de Justicia Deportiva de Castilla-La Mancha, por entender que el derecho de ascenso le correspondía a ellos, al quedar en tercera posición en el grupo del Illescas. Fue entonces cuando el comité le dio la razón al club toledano, privando del ascenso al CD Miguelturreño, en contra de la decisión de la propia federación.
El club churriego, en defensa de sus derechos y tras analizar la situación de forma concienzuda, inició acciones judiciales contra esta decisión, contratando los servicios profesionales de un bufete de abogados, que consideraban factible, en términos jurídicos, interponer el correspondiente recurso ante el contencioso-administrativo.
Debido a la lentitud de los plazos procesales, se interpuso el conveniente recurso solicitando medidas cautelares, ya que de otra forma los daños y perjuicios que se le ocasionarían al Miguelturreño serían irreparables.
El club no solo considera que tiene razón, sino que se afirma que han quebrantado sus derechos desde el momento en el que la resolución del CJDCM modificó la decisión de ascenso adoptada por la FFCM fue adoptada por un órgano que carece de competencia para ello, dado que la propia FFCM es un ente de derecho privado que toma sus decisiones en el ámbito de sus competencias organizativas de las distintas competiciones territoriales, por lo que cualquier discrepancia debería haber sido resuelta por la Jurisdicción Ordinaria, y no por un órgano administrativo.
En definitiva, con las normas jurídicas emanadas y dictadas por la FFCM, aplicables a la situación excepcional que rodea a este caso, el derecho a competir en la categoría de Juvenil Nacional corresponde al CD Miguelturreño.
Por tanto, el club confía en que la razón jurídica esté de su lado y que los tribunales les devuelvan el derecho del que consideran que han sido injustamente despojados.