Rafael Gasset, hijo adoptivo de Miguelturra

Rafael Gasset Chinchilla, madrileño nacido en 1866 fue periodista, abogado y político. En 1884, con solo 18 años, asumió la dirección del periódico El Imparcial tras la muerte de su padre, Eduardo Gasset Artime, fundador y director del diario. Rafael lo llevó a ser uno de los diarios más importantes de la época. Posteriormente se introdujo en el mundo de la política y desde 1900 a 1923 fue ministro hasta en nueve ocasiones, siendo el primer ministro de Agricultura de la historia en España.

Sin olvidar que Gasset fue uno de los mayores representantes de lo que se vino a denominar sistema caciquil y clientelismo político que consistía en un intercambio extraoficial de favores a cambio de apoyo electoral (de hecho, se presentó en varias ocasiones a las elecciones, entre otras, por la circunscripciones de Alcázar de San Juan y de Ciudad Real) del que sacó gran beneficio propio, también hay que reconocerle que dejó bastantes cosas positivas como la construcción de pantanos, embalses, caminos, carreteras, promocionar la primera ley sobre parques naturales, etc.

Rafael Gasset tuvo desde muy joven una relación muy estrecha con esta tierra; convirtiéndose en un asiduo participante de las cacerías de perdiz roja y entablando fuertes vínculos de amistad con gente de la zona como con Macario Dorado, alcalde de Fernán Caballero o con Juan Acedo-Rico, Conde de la Cañada, en cuya casa, ya desaparecida, situada en la calle que actualmente lleva su nombre en Ciudad Real solía alojarse en sus múltiples visitas a la provincia. Esta relación continuó durante toda su vida.

Ya hablé en el capítulo anterior de la afinidad y la relación de Gasset con Miguelturra y el cariño recíproco que se profesaron. Fueron varias las veces que estuvo en la localidad por diferentes razones, no todas ellas por motivos políticos, también en su condición de abogado y que ya iré desgranando en otros capítulos. Además, al estar relacionado con el mundo del periodismo en su condición de periodista y dueño de El Imparcial era una persona bastante mediática, lo que contribuyó a que todo lo que hacía y le rodeaba tuviera mucha repercusión y quedara reflejado en la prensa de la época.

Pero ahora toca de nuevo volver al pantano de Navarredonda impulsado por el propio Gasset y a la sesión extraordinaria que el Pleno del Ayuntamiento celebró aquel 25 de septiembre de 1900 en la Casa Consistorial y en donde va a quedar reflejado a través de una serie de medidas adoptadas por el consistorio ese afecto que Miguelturra le tenía.

En un momento de la sesión tomó la palabra D. Miguel Fernández Gómez en su condición de Alcalde manifestando lo siguiente: “Con motivo de la construcción del pantano de Navarredonda, recientemente acordada por el gobierno de S.M. a petición o propuesta del Excmo. Señor Ministro de Agricultura, Industria, Comercio y Obras Públicas, una parte de este término municipal ha de obtener indiscutibles beneficios, puesto que los canales de riego derivados de expresado pantano, han de recorrer su demarcación y por consiguiente, a nadie ha de ocultarse la importancia tan valiosa que reviste dicho pantano, que viene a ser un alivio para el labrador y el porvenir para la agricultura allí en donde sus aguas alcancen, y por consecuencia, el expresado Señor Ministro de Agricultura es digno de que se le tributen toda clase de homenajes y actos de gratitud por este vecindario, puesto que sin hacer sacrificios de ningún género, se encuentra hoy con uno de los principales reconstituyentes para fomentar la Agricultura, principal ramo de riqueza de esta población; y en tal sentido abrigo el pleno convencimiento de que mi proposición ha de ser secundada por esta Corporación.”

Ante esta manifestación y tras breve deliberación, el pleno del Ayuntamiento, tomó las siguientes medidas:

– “Que se entregue Certificación de este particular a referido Señor Ministro por medio de exposición laudatoria, haciéndose constar en ella en nombre del Ayuntamiento y en el del vecindario, la satisfacción con que han visto su iniciativa en un proyecto de tanta importancia y de resultados tan beneficiosos para la agricultura.”

Como es lógico, los miembros del Ayuntamiento quieren que llegue al Ministro el agradecimiento del pueblo de Miguelturra y las medidas tomadas.

– “Que se coloque en el sitio más conveniente de la Casa Consistorial una lápida conmemorativa para que su nombre sirva de recuerdo simperecedero.”

Esta placa debió permanecer en el antiguo edificio del Ayuntamiento hasta la Guerra Civil.

– “Que para perpetuar la memoria de tan insigne miembro del poder ejecutivo; Excmo Sr. Ministro de Agricultura, Industria, Comercio y Obras Públicas se varíe a la calle de Pizarro este nombre y se sustituya por el de D. Rafael Gasset.”

Efectivamente, desde ese día, una de las calles más céntricas de Miguelturra, la que se llamaba Calle de Pizarro pasó a denominarse calle Rafael Gasset. Con estos datos, es posible que algunos lectores no reconozcan la calle, pero si añado que tras la Guerra Civil pasó a denominarse Paquito León y actualmente se llama calle Carnaval las dudas quedarán despejadas.

– “Nombrar hijo predilecto y adoptivo de esta villa de Miguelturra a tan ilustre prócer D. Rafael Gasset y Chinchilla, como demostración de las simpatías y acrisolado aprecio que hacia él reina en esta localidad.”

Hay que señalar que, en este caso, los miembros del Ayuntamiento cometieron un error, seguramente llevados por el ánimo de gratitud, ya que es requisito indispensable para que una persona sea nombrada hijo predilecto el que haya nacido en la localidad que lo nombra y este no es el caso.

Haciendo esta salvedad, hay que decir que, si poner el nombre de una persona a una de las calles principales ya se trata de una medida a resaltar, con el nombramiento de Rafael Gasset como hijo adoptivo nos encontramos con total seguridad ante la decisión más importante de las tomadas por el Ayuntamiento ese 25 de septiembre de 1900, decisión que trasciende esa época y llega hasta nuestros días.

El hecho de dar el título de hijo adoptivo a una persona no es algo baladí, insignificante o nimio, todo lo contrario, puesto que estamos hablando de un título que es la máxima distinción que puede otorgar un pueblo o ciudad a una persona que no ha nacido en la localidad. Además este título debe ser otorgado por acuerdo del Pleno del Ayuntamiento y no tiene fecha de caducidad, solo se puede revocar en otro acuerdo plenario y por un motivo justificado.

Por lo tanto puedo concluir que, en la actualidad, Rafael Gasset sigue siendo hijo adoptivo de Miguelturra; de hecho, es el único hijo adoptivo que, hasta la fecha, ha tenido y tiene la localidad.

  • Fuentes: Acta de la sesión extraordinaria del Ayuntamiento de Miguelturra del 25 de septiembre de 1900 (facilitada por Brígida Castellanos Romero). «Conóceme. La historia de un embalse en Fernán Caballero» (Francisco Velasco Friginal).
  • (Puedes adquirir el libro “El Eco de Miguelturra” en la Casa de Cultura por 5€)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre protección de datos
Responsable Francisco Sánchez Rivas +info...
Finalidad Gestionar y moderar tus comentarios. +info...
Legitimación Consentimiento del interesado. +info...
Destinatarios Automattic Inc., EEUU para filtrar el spam. +info...
Derechos Acceder, rectificar y cancelar los datos, así como otros derechos. +info...
Información adicional Puedes consultar la información adicional y detallada sobre protección de datos en nuestra página de política de privacidad.